Si pensamos en Adrian Frutiger las palabras que nos vienen a la mente son genio de la tipografía. No podríamos denominar de otra forma a la persona encargada de diseñar algunas de las tipos más conocidas y más utilizadas por las agencias de publicidad y los estudios de diseño. Nació en Suiza en 1928 y más tarde se trasladó a París, donde desarrolló su carrera profesional como diseñador tipográfico. Sus mayores aportaciones fueron la creación de las familias Universe y Frutiger. La primera, o más bien una de sus variantes, fue empleada para la señalización del Metro de París y la segunda, en la del aeropuerto de Charles de Gaulles. Aunque en un principio ambas estaban pensadas para unos usos muy concretos, su excelente legibilidad y la calidad de su diseño las han convertido en unas de las tipografías sin serifa mejor valoradas de todos los tiempos. Su uso es casi universal, funcionando perfectamente tanto en titulares y carteles como en grandes bloques de texto.